Del archivo | Proyecto «Monografía de Milpa Alta: Conocer para gobernar»
Fue en noviembre del año de 2014 cuando se llevó a cabo en la Casa de Cultura «Quinta Axayopa» el encuentro con grupos interesados en la historia, cultura y el desarrollo social de Milpa Alta, para presentar el proyecto académico «Monografía de Milpa Alta: Conocer para gobernar».
El proyecto fue presentado por Gabriel Mejía Delgado, coordinador de dicha obra; Manuel Garcés, presidente del Consejo de la Crónica de Milpa Alta (quien apoyó con la revisión) y el investigador académico de Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, (CIESAS), Juan Manuel Pérez Zevallos, quien dijo que estudios como este, contribuyen a conocer en términos reales, con información estadística y de archivo, la situación de la entonces delegación.
En dicha reunión estuvieron presentes académicos de la región, profesores nahuablantes, cronistas, historiadores, promotores culturales, artistas, ciudadanos con alguna representación social y política, al igual que integrantes de los consejos de pueblo y coordinadores de Enlace Territorial.
A decir del coordinador del proyecto, Gabriel Mejía Delgado, el objetivo de la monografía era el de contribuir al estudio de la delegación Milpa Alta, de tal forma que al análisis de los datos cuanti y cualitativos que de ella emanaran, pudieran ser tomados en cuenta en el diseño de políticas públicas. «En nuestro país es muy común que quien aspira a gobernar, olvide que eso lo obliga a ser estadista, a conocer el lugar que pretende gobernar, cuáles son las necesidades, problemas y oportunidades que existen, con una visión objetiva, informada, que den orientación a las decisiones», dijo entonces.
El trabajo, se asentó, buscaba argumentar, exponer y describir, aspectos clave, a través de la percepción de quienes viven en ella, complementada con fuentes bibliográficas y hemerográficas, así como estadísticas.
A cada uno de los asistentes se les entregó una carpeta que contiene la obra de forma digital, misma que en palabras de Garcés Jiménez, todo milpaltense debería conocer, «desde los niños, hasta la señora ama de casa, los jóvenes, los adultos mayores, y no se diga quien pretenda tener un cargo de representación popular, (porque) deben conocer su tierra y esta es una oportunidad».
La obra se divide en siete apartados con los cuales se buscó abarcar los temas de mayor interés público.
Breve esbozo histórico. Abarca los principales acontecimientos, desde la época prehispánica hasta la actual. Destacando hechos como la Revolución Mexicana y las décadas de los años veinte y treinta.
Reserva ecológica del DF. Destaca la importancia de este lugar, por los servicios ambientales que aporta a la capital del país, ya que como parte del Eje Neovolcánico Transversal, concentra gran número de especies endémicas y suelos de recarga acuífera, por mencionar algunos. En 1980, fue declarada zona de conservación ecológica.
La comunidad de una sociedad cambiante. Aborda el conflicto sobre la propiedad de la tierra entre Milpa Alta y Cuauhtenco, a la vez que da una explicación conceptual para entender a Milpa Alta, como «comunidad» o como «sociedad» según el politólogo Robert Nisbet. También menciona las formas de organización social más antiguas como el Tequio, la Junta de Mejoras, Enlaces Territoriales y, a su vez, las más recientes con validez y reconocimiento jurídico como los Consejos de Pueblo y Comités Vecinales.
El proceso de urbanización. La transformación de la imagen urbana, así como un balance en la dotación de servicios públicos, como parte del desdoblamiento natural de la población.
Desarrollo social. Se analizan cifras y estudios que dan cuenta de la situación en el avance de derechos humanos como salud, educación y atención a grupos vulnerables, por citar algunos.
Desarrollo rural y economía del nopal. El cultivo y la comercialización del nopal es fundamental en el estudio de la economía de la delegación, sin embargo, la diversificación de actividades productivas que posibilita el contexto rural, obliga a mencionar otras fuentes de ingreso como la producción de mole, hortalizas, plantas endémicas (maíz nativo), medicinales y de ornato, y la cada vez mayor apuesta al sector servicios.
Tradiciones y costumbres. Mayordomías, peregrinaciones, fiestas patronales y regionales, así como el rescate de los juegos autóctonos, la herbolaria y la medicina tradicional, que aún forman parte de la vida cotidiana de sus habitantes.
Por último, cabe destacar que dicha casa de cultura, ubicada en el pueblo de San Pablo Oztotepec, guarda aún los rasgos de lo que un día fue: la casona más decorosa que existió durante los últimos años de la época colonial en esta zona. ♦
Revista Nosotros 
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